domingo, 19 de noviembre de 2006

LAS FLORES


LAS FLORES


Nos rodeamos de flores por su belleza y fragancia y porqué nos proporcionan serenidad en el jardín y/o en nuestro hogar.
En el Romanticismo, el recurso de “hacer hablar a las flores” era un secreto que las madres legaban a sus hijas, para, a través de él, comunicar numerosos sentimientos: vida, belleza, desánimo, muerte, soledad... pero sobre todo amor.

Contemplamos flores silvestres en la naturaleza. Las cultivamos y compramos por su función ornamental, medicinal, cosmética, sentimental, etc.

Algunas flores nos benefician por sus propiedades medicinales. El primer texto de plantas medicinales es de los Sumerios y data de 3.000 años A.C. en tablillas de barro. Hasta llegar al famoso Dr. Bach quién catalogó flores para remediar el estado anímico y sentimental.

EL LENGUAJE DE LAS FLORES

Todas las flores cuentan con un lenguaje propio, y con cada una de ellas podemos transmitir un mensaje diferente. Desde la antigüedad, las flores han sido una noble vía para dar a conocer y transmitir sentimientos. El lenguaje de las flores tiene sus orígenes en Oriente y se ha transmitido de generación en generación y de cultura en cultura, pasando por el Antiguo Egipto, la Edad Media, el Renacimiento, hasta llegar al Romanticismo, época ésta en que tuvo su máximo apogeo.

Teniendo en consideración estas raíces históricas, existe un lenguaje popular asociado a las flores y una alternativa para cada ocasión. Por ejemplo, la rosa roja es sinónimo de amor, la amarilla de amistad, la blanca de miedo, la rosada de indecisión.


Escribe tus opiniones, comentarios y sugerencias sobre este tema de las flores. ¿Cuál es tu flor favorita? ¿Qué mensaje se asocia con la flor? ¿Qué flor regalarías en qué ocasión? ¿Qué emociones se relacionan con su color?

1 comentario:

Elena dijo...

Hola Gisela,

pues me gustaría decirte que tienes un blog muy original, así que enhorabuena.
El otro día leí tus comentarios en mi blog, y la verdad es que yo también me puse un poco ñoña...
Bueno, pero vamos a hablar de flores. A mí me gustan mucho las margaritas: son flores silvestres, así que se puede decir que también salvajes, y muy bonitas. Además, me transmiten también una sensaciñon de sencillez, así tan pequeñitas y sin resaltar sobre las demás. Supongo que este sentimiento puede estar relacionado con lo que tú mencionas sobre la inocencia y la pureza...
Pueden ser de muchos colores; blancas, rosa, lila, naranja, amarillas...así que para mí pueden reflejar diferentes estados de ánimo, que al fin y al cabo, es lo que hay en la vida.
Nada, que ahora mismo me siento como una margarita ;-)
Gisela, mucha suerte con tu colorido blog, ya continuaré paseando por este prado lleno de florecillas :-)

Elena